La crisis financiera de 2007-08 tuvo un gran impacto en la economía española. El espectacular colapso del sector inmobiliario disparó la tasa de desempleo hasta llegar al 27% en 2013, lo que sacudió las bases políticas, institucionales y sociales del país. Ahora parece verse la luz al final del túnel, gracias a algunas de las medidas adoptadas y sus fortalezas innatas, en particular gracias a la red familiar.
Este libro busca explicar cómo España ha pasado de la crisis a una incipiente recuperación, atendiendo a las reformas y los principales sectores –fundamentos macroeconómicos, exportaciones, sector bancario, inversiones en el extranjero, inversión directa extranjera en España, etc.–. También analiza los retos del futuro inmediato, incluyendo la nueva situación política, con la erosión del bipartidismo y el auge de dos nuevos partidos, Podemos y Ciudadanos.