41ª Oleada BRIE, abril 2020

41ª Oleada BRIE, abril 2020

41ª OLEADA DEL BARÓMETRO DEL REAL INSTITUTO ELCANO (ABRIL 2020)

Actualizado: 12/5/2020.

Nota previa y principales conclusiones

Este BRIE fue diseñado antes de que el coronavirus provocase un estado de excepcionalidad en la vida nacional e internacional. Por tanto, el cuestionario no indagaba sobre el impacto de la epidemia. A pesar de ello, su efecto es perceptible en las respuestas a varias de las preguntas. Otras no se ven afectadas de ninguna forma por esta pandemia. Estas son las principales conclusiones:

  • Esta crisis ha provocado un aumento notable de la autoestima de los españoles. Ese cambio se aprecia tanto en la valoración que dan al país, como en el aumento sustancial del sentimiento de orgullo de ser españoles
  • El prestigio de China en España aumenta ligeramente (por tanto, no se resiente por el coronavirus)
  • China se convierte en el segundo aliado internacional (fuera de la UE) preferido por los españoles, sólo por detrás de EEUU
  • EEUU y China se encuentran a la par como posibles fuentes de amenaza para nuestro país. En ambos casos, la principal amenaza que deriva de ellos es la relacionada con el comercio. No hay contradicción entre que se les perciba como amenaza y que se les prefiera como aliados. Es racional preferir como aliado al que, de no serlo, puede hacer más daño.
  • La inmensa mayoría de los españoles (93%) cree que la rivalidad chino-americana puede tener o tiene ya consecuencias negativas para España. 
  • Francia ha superado a Alemania como principal aliado preferido para España dentro de la UE, en lo que parece una consecuencia de las diferentes apuestas sobre la reacción económica de la UE ante la crisis provocada por el coronavirus.
  • También a consecuencia del virus, la inversión en ciencia se considera, junto con la inversión en energías alternativas, la prioridad para el gasto de la UE. En último lugar quedan la defensa y la política exterior europeas. 
  • El 75% de los españoles no tiene interés en la vida política de EEUU y el 70% no conoce el nombre de ninguno de los candidatos a las primarias demócratas
  • El cambio climático sigue encabezando la lista de prioridades de la acción exterior española (las opciones son las mismas que en cuestionario anteriores, es decir, el coronavirus no está incluido). La inmigración sigue recibiendo poca atención como objetivo político.
  • Pese a esa preocupación por el cambio climático, un 40% cree que no estamos aún en un estado de emergencia y sólo la mitad sabe que el Gobierno ha tomado alguna medida respecto al cambio climático.
  • Los españoles no son conscientes del impacto en el clima de sus decisiones como consumidores: no tienen en cuenta el efecto de los gases producidos por los aviones, por el transporte de mercancías o por la ganadería.
  • La mitad de los españoles cree que España no debe actuar de ninguna forma respecto al conflicto de Venezuela.
  • Aumenta el apoyo en España a la pertenencia a la OTAN y a la cesión de uso a EEUU de la base Morón y el puerto de Rota.

Ficha técnica

  • Universo: Individuos residentes en las 17 Comunidades y las dos Ciudades Autónomas españolas, de 18 o más años.
  • Muestreo: Estratificado por Comunidad Autónoma y tamaño del municipio, con cuotas de nivel educativo, sexo y edad proporcionales a la distribución de la población.
  • Tamaño muestral: 1000 entrevistas.
  • Tipo de entrevista: Entrevistas telefónicas, tanto a dispositivos fijos como móviles.
  • Error de muestreo: Para datos globales, bajo el supuesto de un muestreo aleatorio simple y un margen de confianza del 95,5% y en la hipótesis más desfavorable, se sitúa en +/- 3`2 %.
  • Fechas del campo: El trabajo de campo se ha realizado del 2 y el 19 de marzo del 2020.
  • Trabajo de campo y tabulación de datos: Han sido llevados a cabo por Random Strategy.
  • Elaboración: Carmen González Enríquez.

El prestigio de los países y la autoestima de los españoles

Una consecuencia inesperada de la pandemia ha sido un aumento general de la valoración que los españoles hacen de los países. Esto puede deberse al efecto de aumento de la empatía con todos los demás seres humanos que, estén donde estén, sufren ahora la misma amenaza a su salud y su vida. En cualquier caso, dentro de este aumento general llama la atención la situación de China, origen de la transmisión del virus a los humanos. Su prestigio entre los españoles no se ha visto afectado negativamente, quizá porque ese hecho, ser el origen geográfico, se ve compensado con las noticias sobre su capacidad para salir de la pandemia e incluso por sus gestos hacia España y otros países en la dotación de material médico. La actitud de la comunidad china en España, la primera en reaccionar ante la epidemia cerrando sus tiendas, y las imágenes de inmigrantes chinos en ciudades españolas ofreciendo mascarillas a personal de las fuerzas de seguridad, han podido contrarrestar la imagen negativa de China por ser el origen de la epidemia.

Pero más llamativo aún es el significativo aumento de la valoración entre los españoles del país propio, España, que ha subido en un punto y medio. Esta subida está muy por encima de la subida media de la valoración de todos los demás países.

Esta recuperación de la autoestima de los españoles es más visible en las respuestas a esta pregunta: “¿Cómo de orgulloso se siente usted de ser español? Mucho, bastante, poco o nada”.  Sólo un 5% contesta que no se siente español. El porcentaje de los que se sienten “muy orgullosos” pasa del 41%, a finales del 2018, al 56% ahora.

Esta recuperación del orgullo se aprecia en todos los segmentos ideológicos: sigue siendo más fuerte entre la derecha que entre la izquierda, pero aumenta en todos los casos.

La mejoría de la valoración de los países no tiene equivalente en la valoración de los líderes internacionales, lo que refuerza la hipótesis de que el cambio se debe a un sentimiento de empatía hacia el sufrimiento de los seres humanos de cualquier nacionalidad y no a la actuación de los países en la esfera internacional.  Llama la atención el descenso en el prestigio del Papa Francisco I, quizá ya desprovisto del áurea de excepcionalidad con que contaba al principio de su Papado.

Prioridades de la política exterior española

El cambio climático sigue siendo la primera prioridad preferida para la política exterior española, pero la epidemia del COVID-19 ha alterado el orden de las demás prioridades (recordemos que la respuesta a la epidemia no se ofrecía entre las posibles alternativas).  Ahora, la ayuda a los países en desarrollo ha pasado a ser la segunda prioridad, probablemente porque los entrevistados piensan en la situación que afrontan estos países ante el virus, por sus débiles sistemas sanitarios y económicos, seguida en tercer lugar por el apoyo a las empresas españolas, tan afectadas por esta crisis sanitaria.

Conviene llamar la atención sobre el hecho de que impedir la inmigración irregular sigue apareciendo en último lugar entre la lista de las prioridades sugeridas para la política exterior española. En este aspecto España sigue siendo un caso excepcional en el marco europeo, en el que este tema ha sido durante los últimos años una de las principales preocupaciones y prioridades de los ciudadanos. Esa excepcionalidad se mantiene pese al éxito y mayor visibilidad de un partido de ámbito nacional con un mensaje antiinmigración y especialmente duro contra la inmigración irregular.

Amenazas de países para España

Un modo indirecto de captar las prioridades de la opinión pública en relación con la política exterior es indagar en la percepción de posibles amenazas para España. Hemos pedido a los entrevistados que valoren de 0 a 10 hasta qué punto cada uno de estos países puede considerarse una amenaza de cualquier tipo para España y el resultado muestra que la percepción de amenaza es en general baja. Sin embargo, llama la atención que China y Estados Unidos estén a la par en cuanto a su consideración como peligro para España. En ambos casos, como se señala después, la competencia comercial entre ellos es la principal fuente de amenaza para España. En el caso de China, ese elemento de guerra comercial es mucho más preocupante que el de origen de enfermedades.

En las respuestas espontáneas a la pregunta de qué tipo de amenazas puede temer España de cada uno de estos países, los problemas relacionados con la economía dominan las respuestas tanto en el caso de Rusia como en el de China o de EEUU, mientras que, como puede esperarse, los conflictos bélicos son el principal motivo de preocupación en relación con los países de Oriente MedioLibia o Corea del Norte. En el caso de Marruecos el primer motivo de temor es la inmigración irregular, seguida por la competencia comercial.  La pregunta sobre las causas de amenaza se ha hecho únicamente a los que previamente habían evaluado con una nota superior a 3 el grado de amenaza que ese país puede suponer para España.  Sólo se recogen las respuestas que superan el 2% de menciones para cada país.

Principales aliados en la UE y en el mundo

La crisis económica producida por el coronavirus y su gestión dentro de la Unión Europea ha producido un cambio en las preferencias de los españoles respecto a qué país debe ser el principal aliado del nuestro dentro de la UE. Alemania y Francia han ocupado siempre las dos primeras posiciones en esta lista, pero Alemania, percibida como el país más influyente, ocupaba generalmente la cabeza a buena distancia de Francia. En esta ocasión, sin embargo, Francia adelanta a Alemania porque la crisis de la epidemia ha provocado un enfrentamiento entre los países del sur y los del centro-norte, en el que Francia se ha situado al lado de España e Italia en sus propuestas de mayor respuesta económica europea conjunta, frente a Alemania y Países Bajos, renuentes a aceptar esta mayor solidaridad económica. En estas condiciones, los españoles parecen razonar que conviene defenderse acercándose al segundo más fuerte del grupo, que a su vez comparte posiciones con nuestro país en esta crisis, Francia.

En lo que respecta al resto del mundo, fuera de la Unión Europea, resulta llamativa la conversión de China en un aliado preferido por los españoles, el segundo después de EEUU, y por encima de América Latina. No existe contradicción entre los datos que se han presentado anteriormente, el hecho de que tanto EEUU como China sean percibidos como fuentes de amenaza para España, y esta preferencia por ambos países como principales aliados internacionales. En este caso, no existe un tercer país que pueda actuar como freno a la influencia, positiva o negativa, que tanto China como EEUU pueden ejercer sobre España. Por tanto, no queda otro remedio que elegirlos como aliados.

Prioridades de gasto para la Unión Europea

Antes de que el coronavirus alterase por completo la vida política de la Unión Europea, la atención de sus instituciones y de los Estados miembros estaba puesta en la elaboración del Marco Financiero Plurianual (el presupuesto) para los años 2021 a 2007. Pese a que la atención se ha desviado ahora hacia otros temas, ese Marco en cualquier caso tiene que negociarse y finalmente aprobarse. En este sentido, lo que la encuesta revela es que la preferencia entre los españoles respecto al gasto europeo se dirige a la inversión en ciencia, probablemente como consecuencia de la crisis vírica y el papel de la ciencia como proveedora de soluciones médicas, y hacia las energías renovables para disminuir el cambio climático. Ambas políticas superan a las dos de las que España es o ha sido una gran beneficiara: la Política Agraria Común y la de apoyo a las regiones más pobres.

Tanto en esta encuesta como en las anteriores del Real Instituto Elcano, e incluso en las mucho más antiguas (años 90) del INCIPE, se muestra la escasa valoración que muestran los españoles respecto a la política exterior y de defensa nacionales (compatible esta última con una muy alta valoración de los militares). Esto mismo se aplica al contexto europeo, y, en consecuencia, las políticas europeas de defensa y exterior resultan las menos valoradas, como se deduce de la preferencia mayoritaria de no invertir más en ellas.

Desinterés por la política de otros países: EEUU, Venezuela y Rusia

Pese a su gran presencia mediática en España, la gran mayoría de los españoles no tiene interés por la vida política interna norteamericana. El 75% de los entrevistados dicen tener poco o ningún interés por lo que sucede en EEUU, un dato confirmado por el hecho de que el 70% no recuerda el nombre de ninguno de los candidatos a la nominación a la Presidencia por parte del Partido Demócrata. Sólo el 27% sabe que en EEUU se celebrarán elecciones presidenciales en noviembre o, más genéricamente, a finales de este año. Hay que recordar que esta encuesta se inició cuando todavía las primarias demócratas estadounidenses ocupaban a diario espacio en los medios de comunicación.

Respecto a Venezuela, los entrevistados están divididos a partes casi iguales respecto a si España debe intervenir de alguna forma en su conflicto.  Casi la mitad cree que nuestro país no debería hacer nada al respecto. El resto se divide en su elección de opciones respecto a qué hacer: el grupo más numeroso apoya que nuestro país tenga un papel mediador, seguido por los que creen que España debería apoyar a Juan Guaidó.

En cuanto a Rusia, sólo un 20% de los entrevistados sabe que las relaciones de la Unión Europea con este país son malas y la gran mayoría desconoce la causa de las sanciones que la UE le impuso.  Sólo un 12% de los entrevistados menciona Crimea o Ucrania cuando se les pregunta por las razones de esas sanciones. A pesar de ello, el 56%, cree que esas sanciones deben mantenerse. Esta respuesta mayoritaria es aún más llamativa cuando se tiene en cuenta que la formulación de la pregunta informaba a los entrevistados de que “Tras las sanciones de la Unión Europea, Rusia decidió prohibir las importaciones de muchos productos europeos, entre ellos, productos agrícolas que se cultivan en España”. Este aparente desajuste entre el desconocimiento de la causa de las sanciones y su apoyo pese a las consecuencias negativas para España, muestra la gran confianza de los ciudadanos españoles hacia la Unión Europea: se apoyan las sanciones porque la UE las impuso y se da por sentado que están bien justificadas.

Cambio climático

Pese a la relevancia del cambio climático como motivo de preocupación para los españoles, una buena parte de ellos no comparte el sentimiento de urgencia ante ese cambio que se deduce de los análisis científicos y que en España llevó al Gobierno a decretar el pasado enero el estado de emergencia climática. Además, el nivel de información entre la población sobre las medidas que se toman para frenar el cambio climático es relativamente bajo, así como es escaso el cambio en los comportamientos individuales.

Sólo algo más de la mitad de los españoles sabe que el Gobierno ha propuesto y/o adoptado alguna medida para frenar el cambio climático.

Entre los que conocen alguna propuesta o medida, éstas son las más citadas en respuesta a una pregunta abierta y de posible respuesta múltiple.

Como se ve en el gráfico, la propuesta más conocida es la prohibición de acceso al centro de las ciudades de los vehículos contaminantes, una medida cuya responsabilidad recae en los Ayuntamientos. Por otra parte, esa restricción al tráfico es apoyada de forma masiva. En una escala de 0 (ningún apoyo) a 10 (máximo apoyo) la media del apoyo es de 7`2.

En la encuesta monográfica sobre el cambio climático que el Real Instituto Elcano elaboró en el 2019 se detectaba la escasa conciencia de los españoles sobre su responsabilidad individual en la producción de gases de efecto invernadero. En este BRIE hemos indagado en los comportamientos individuales de los ciudadanos en dos áreas que son responsables de buena parte de las emisiones de gases de efecto invernadero: el transporte y la ganadería.

En cuanto al transporte, muy pocos de los entrevistados han pensado en cambiar su destino vacacional teniendo en cuenta la emisión de gases por parte de los aviones. En concreto, sólo un 6% ha decidido alguna vez su destino de vacaciones teniendo en cuenta este factor.

También son muy pocos, una minoría del 4%, los que tienen en cuenta el factor de la lejanía -y por tanto el efecto emisor de gases del transporte- a la hora de elegir los productos que compran. La pregunta se refería específicamente a “ropa o fruta”. Un 30% dice no estar interesado en el país de origen de lo que compra.

Respecto a la ganadería, la emisión de metano por vacas, cerdos y otros animales comestibles es ignorada y no tiene ningún efecto en los hábitos alimentarios de los españoles. Aunque un 30% de los entrevistados dice haber reducido su consumo de carne en el último año, sólo una pequeña parte de ellos, que representa un 5% del total de la población, lo ha hecho para reducir la emisión de metano a la atmósfera.

En conjunto, estas respuestas respecto a hábitos de consumo muestran que la preocupación de los españoles por el cambio climático está todavía lejos de producir cambios significativos en los comportamientos de los individuos.

La OTAN y las bases usadas por EEUU en España

El apoyo a la pertenencia de España a la OTAN sigue siendo muy mayoritario, del 80%, e incluso ha aumentado ligeramente respecto al BRIE anterior, del 2018. Posiblemente esta ligera subida de 5 puntos porcentuales esté relacionada con el papel relevante desempeñado por el Ejército español en tareas asociadas a la lucha contra la pandemia. Esa actuación ha producido un aumento del prestigio de la institución militar, como recoge esta encuesta. Por otro lado, la actuación de la OTAN en España en la provisión de material de protección contra el coronavirus probablemente ha actuado en el mismo sentido de aumento de su prestigio, aunque ese impacto no quede medido en este BRIE ya que se produjo poco después de que el trabajo de campo de esta encuesta hubiera terminado.

Como en años anteriores, este BRIE ha vuelto a testar el apoyo de la opinión pública al uso de la base aérea de Morón y el puerto de Rota por Estados Unidos.  Los resultados muestran que sigue aumentando el apoyo a ese uso.