Hoy se presenta el Informe Elcano de Presencia Global 2022, trabajo en el que se analizan los principales resultados de la 12ª edición del Índice Elcano de Presencia Global.
El Índice Elcano de Presencia Global agrega y cuantifica la proyección exterior y el posicionamiento internacional de los países en función de las tres dimensiones que conforman su presencia: económica, militar y blanda. Calculado para 150 países, el índice incluye 16 variables y ofrece resultados desde 1990. Ello permite analizar la evolución del proceso de globalización desde entonces y el modo en que se insertan en ella los diferentes países para los que se calcula.
La presencia global podría definirse como la medida y forma en que los países están “ahí fuera”, independientemente de que, además, ejerzan influencia o poder. De algún modo, la presencia global podría ser la base del poder; la plataforma o activo a transformar en influencia o poder, si es que el país tiene la capacidad y la voluntad de hacerlo.
Con esta publicación, retomamos esta serie tras las pandemia, pues con ésta, los esfuerzos se centraron en tratar de atisbar, con el uso de este Índice, cuál podría ser el comportamiento del proceso de globalización, lo que dio lugar a una serie de análisis que actualizaban semestralmente las principales tendencias de los intercambios globales. En esta edición, el primer impacto de la pandemia en la globalización está recogido, dado que las variables que alimentan el índice incluyen ya los resultados de 2020 y en algún caso de 2021.
Post-globalización
Antes del estallido de la pandemia, la globalización ya mostraba signos de fatiga. De hecho, la suma del valor del Índice Elcano de Presencia Global de todos los países para los que lo calculamos había alcanzado su máximo en 2015. Los nuevos datos para 2021 muestran una contracción de este valor agregado de un 2,35% respecto del año anterior, siendo ésta la mayor caída anual de toda la serie temporal.
De las tres dimensiones de presencia económica, militar y blanda, esta última es la más golpeada por esta contracción (7% entre 2020 y 2021), a pesar de que los intercambios blandos habían sido los que habían mostrado un mayor dinamismo durante las dos últimas décadas.
Y es que, en términos agregados, desde la crisis de 2008 la dimensión económica, que había liderado hasta entonces el proceso de globalización, venía mostrando una tendencia errática, con caídas en años puntuales y con incrementos muy escasos en comparación con años previos, y la dimensión militar también marcaba una tendencia de descenso. Así, fue la dimensión blanda la que sostuvo el crecimiento agregado de presencia global en los últimos años, y particularmente las variables directamente relacionadas con la movilidad de personas (migraciones, turismo, educación).
¿Un ranking estable de presencia global?
Al igual que en ediciones anteriores del Índice Elcano de Presencia Global, el ranking de los 20 primeros países se mantiene relativamente estable, con el mismo grupo de países ocupando posiciones similares durante varios años consecutivos y mostrando que, a pesar de los cambios geopolíticos y geoeconómicos descritos en ediciones anteriores de este informe, Occidente y/o el Norte siguen acaparando gran parte de la presencia global agregada. Pero la evolución desde 1990 no es homogénea, habiendo países con incrementos de presencia muy superiores a otros en el mismo periodo, modificándose con ello el orden de las posiciones. Así, en 1990, el ranking estaba liderado por EEUU, seguido de Rusia, Francia y el Reino Unido; en 2022, EEUU sigue en la primera posición, seguido de China, Alemania y Japón.
EEUU es, después de China, el país que más presencia global gana en este periodo y sigue liderando cada una de las tres dimensiones y la mayoría de los indicadores. Pero el aumento del volumen de proyección exterior de China es superior y sigue reduciendo la brecha de presencia global con respecto a EEUU. El valor del índice de presencia global china es ahora 2,3 veces inferior al de EEUU (2,9 veces sólo un año antes). No obstante, la brecha entre, por una parte, China y, por otra, EEUU y la UE sigue siendo visible y, a pesar de su fuerte crecimiento, la presencia global de China es hoy menos de la mitad de la de EEUU en la década de 1990.
España es el país que pierde el mayor volumen de presencia global en el último año, de entre los 150 países para los que calculamos el Índice, a pesar de conservar su 13ª posición. El efecto de la pandemia ha sido especialmente fuerte en la economía española, entre otros motivos por la fuerte dependencia del turismo en los últimos años de recuperación económica. De las 16 variables que incluyen el índice se registran pérdidas de presencia en todas ellas excepto en exportaciones de bienes primarias e inversión exterior.
¿Europa global?
Calculamos el índice de presencia global para la UE como si fuera un solo país, lo que permite analizar su papel internacional, en comparación con EEUU y China.
La UE registra un valor índice de presencia global de 3.377 puntos en 2021, superior al de EEUU (3.241) y muy superior al de China (1.365). El potencial liderazgo mundial de la UE se basa en su dimensión económica, superior a la de EEUU y mucho mayor que la de China. En menor medida, la UE es también un líder blando, dimensión en la que también supera a las dos potencias mundiales. La proyección militar de la UE es, por el contrario, discreta y sustancialmente inferior a la de EEUU que es, con diferencia, el líder mundial militar. El principal fundamento de la proyección exterior china es económico, aunque las presencias militar y blanda adquieran relevancia.
Sin embargo, entre 2020 y 2021, la presencia global de la UE disminuye en 300 puntos, mientras que la proyección exterior de EEUU cae sólo en 6 y la de China aumenta en 62. Es decir, a pesar de que la crisis sanitaria se originó́ en China y de la dureza de las medidas aplicadas en este país, Occidente parece haberse visto más perjudicado en términos de presencia global. En el caso de la UE, este comportamiento también responde a un efecto de recomposición, ya que los datos de 2020 reflejan la presencia global de la UE-28 mientras que los de 2021 se refieren a la UE-27, sin el Reino Unido. Cabe señalar que la UE podría haber aumentado su presencia global a pesar de la salida del Reino Unido. Esto sería así porque, aunque, por un lado, pierde un actor global importante, por otro, la UE gana un socio de peso para su presencia exterior. Los datos de presencia global indicarían que el efecto neto habría sido negativo.
No obstante, hay que tener en cuenta que estos análisis son sobre tendencias todavía no consolidadas y recogen en buena medida el shock de la pandemia y de las medidas aplicadas. Por ejemplo, el impulso exportador chino durante los primeros meses de 2020 parece ahora ralentizarse e incrementarse las malas previsiones sobre su crecimiento económico tras la pandemia y la larga duración de los confinamientos. Del mismo modo, esta edición tampoco recoge el efecto de la guerra en Ucrania, de las sanciones a Rusia ni de la crisis energética, que será visible en futuras ediciones del índice.