“L’Afrique est si immense et si multiple: elle exige des visions et des analyses qui tiennent compte de sa diversité et de sa pluralité si l’Afrique peut se définir au singulier, elle doit se composer et se décliner au pluriel. Je ne crois pas me tromper en disant que son passé est encore indéfini, son présent est moins que parfait et son futur est au conditionnel” (Louis Sabourin, Un demi-siècle d’Independence en Afrique, Québec, 2010).[1]

Resumen

Este documento de trabajo pretende mostrar un África en la que creer, a la que apoyar con visión a largo plazo, y que muestra oportunidades y realidades que no deben desconocerse. En lo que nos atañe como país y como empresas, debemos dedicarle especial sentido y atención. España debe centrarse en este continente, apostar por él y dedicar recursos económicos e intelectuales a lograr un intercambio duradero y beneficioso. Más aún en momentos como los actuales, en que algunas geografías ya maduras sufren un importante desgaste, mientras que otras como la africana pueden ayudarnos empresarialmente. Algunos países asiáticos, como China y la India, ya lo han comprendido, pues su modelo es perfectamente exportable al continente africano. Su recorrido de crecimiento ha sido sólido y duradero, y los países africanos ya están empezando a reflejarse en el mismo. Las oportunidades en el exterior no sólo están en los mercados maduros como la UE o en proceso acelerado de madurez como América Latina, sino también en regiones que experimentan una aceleración de su ritmo de crecimiento, como es el caso de África.

Introducción

El escenario geo-económico africano, antaño dominado por las potencias coloniales europeas, ha ido mutando con la aparición de nuevos actores. Primero a causa de la Guerra Fría, con la presencia de EEUU y Rusia, países de la Europa del Este y Cuba. También a raíz de los atentados del 11 de septiembre, con la aparición del terrorismo en el Sahel. Y, desde luego, con la carrera por la explotación y adquisición de los recursos naturales que explican la presencia de la mayoría de los países de la OCDE, pero también de China, la India, Brasil, Corea del Sur y otros emergentes.

Hablar hoy de África es hablar de 54 países (contando Sudán del Sur) con 54 regulaciones distintas en un continente donde se hablan unas 2.000 lenguas, aunque exista predominio del inglés y el francés, producto de la herencia colonial. Se trata de un continente donde se intuyen muchas cosas, pero que necesita de un conocimiento a fondo antes de adentrarse en el mismo. La presencia de la empresa española en África Subsahariana lleva años de retraso en comparación con otras naciones europeas y no europeas, casos de Francia, el Reino Unido, Alemania, EEUU y más recientemente China, que hoy es un actor principal en el continente.

África presenta oportunidades y riesgos, pero lo que no debe es olvidarse. La empresa española no está muy lejos geográficamente de Mauritania, Senegal, Camerún, Ghana, Costa de Marfil, Gabón o Guinea Ecuatorial, por citar algunos países pertenecientes al África Occidental y Central. Lo cierto es que África ha despertado y ha vuelto desde hace más de una década a suscitar un enorme interés por parte de los inversores extranjeros.

La crisis económica ha empujado a las empresas españolas a salir al exterior, y la búsqueda de nuevos mercados, en este caso el africano subsahariano, es hoy una imperiosa necesidad. Salir al exterior conlleva preparación para poder hacerlo, conocimientos del terreno, saber con quién asociarse y tener cobertura en determinados mercados. La empresa española, y en concreto la PYME, tiene una puerta abierta en África. Esa puerta no está exenta de riesgos, pero una PYME bien dirigida, apoyada por la red de oficinas comerciales, con buenos contactos y las necesarias coberturas de riesgo podría comerciar primero, y luego invertir, en el África Subsahariana.

Lamentablemente, en términos generales las empresas españolas no lo están haciendo, a diferencia de otros países. El factor determinante de esta ausencia sigue siendo la percepción de vacío entre la visión histórica negativa acerca del continente y la positiva realidad de una década de crecimiento en el mismo. La percepción es que África es a menudo políticamente inestable, corrupta y más difícil para hacer negocios que cualquier otra parte del mundo. Los hechos demuestran que no es así. África se está democratizando, la mayoría de los países han dado un giro o están en proceso de hacerlo hacia alguna forma de democracia participativa, y este proceso ha venido acompañado de una reducción de los conflictos armados a través del continente. Entre los ejemplos recientes pueden citarse el referéndum en Sudán del Sur, las elecciones nigerianas y la pacifica transferencia de poder en Zambia.

Una nueva mirada sobre África

Algunas cifras iniciales sobre África pueden ayudar a poner en perspectiva el dinamismo económico del continente:

  • Una población de mil millones.
  • Siete economías africanas entre las 10 de mayor crecimiento en el mundo entre 2010 y 2015.
  • Una cuota del 5,5% del total de proyectos de inversión extranjera en el mundo.
  • 26 Estados africanos comprendidos en el acuerdo tripartito de libre comercio (T-FTA de 2008) con un mercado de 600 millones de personas, un PIB total de un billón de dólares, y un crecimiento del PIB a largo plazo superior a un 5% (este acuerdo empezará a funcionar a partir de junio 2014).
  • 85.000 millones de dólares de financiación en infraestructuras en 2010.
  • Una inversión extranjera directa que ha crecido a un ritmo compuesto del 20% desde 2007.

África es un continente de contrastes, rico en recursos naturales pero cuya población está entre las más pobres del mundo. La imagen que se tiene de África es la de un continente enfermo, hambriento y corrupto, necesitado de ayuda y sin un futuro claro. Pero hay otra historia de África de la que se habla menos y que refleja los cambios llevados a cabo en el continente y que empiezan a reconocerse: progreso educativo, más niños en las escuelas, menos guerras civiles, un crecimiento sostenido, un mejor gobierno y una clase media creciente (Banco Africano de Desarrollo, 2012).

África representa el 4% de la riqueza mundial, pero en 2030 ese porcentaje subirá al 7%, y al 12% en 2050. Según Banque Lazard Afrique, el siglo XXI será africano.[2] Un total de 28 países de los 54 que componen el continente crecerán a un promedio anual del 5% en los próximos cinco años, y algunos por encima de esa tasa, como Ghana, que se ha sumado en 2011 a otros productores de petróleo como Angola, Nigeria y Guinea Ecuatorial. África es, en todo caso, un continente a dos velocidades: las previsiones de crecimiento del PIB son del 5,3% para 2012 y del 5,6% para 2013. Las perspectivas económicas del continente están sujetas, sin embargo, a toda una batería de factores imprevisibles, sin olvidar que una crisis más profunda de la zona euro conllevaría un debilitamiento mundial marcado por un escenario más pesimista. En lo que a África se refiere, ello podría derivar en una bajada de ingresos provenientes de las exportaciones y el turismo, un efecto contagio para los bancos africanos, así como una reducción en los fondos de ayuda al desarrollo, la inversión extranjera directa y las transferencias de los emigrantes.[3]

Una bajada de un punto en el porcentaje de crecimiento del PIB de los países de la OCDE se traduciría en una bajada de medio punto de la tasa de crecimiento en el continente africano. La vía de transmisión más importante sería el comercio exterior. Las estimaciones señalan que una bajada de un punto de porcentaje del PIB de los países OCDE se traduciría en una reducción de un 10% en los ingresos provenientes de las exportaciones de África y en un descenso del 2,5% en las importaciones. El impacto podría ser aún más grave en aquellos países donde las exportaciones no están diversificadas y las protecciones (coberturas) previstas son débiles. El African Economic Outlook del BAFD señala que el continente africano debe centrarse en fomentar las reformas necesarias para incentivar el crecimiento, y evitar tensiones como las que tuvieron lugar en sus vecinos del norte de África.

África fue en la década de 2000 el segundo continente en tener un crecimiento más acelerado. Este crecimiento refleja fundamentalmente mejoras en el mapa macroeconómico, en la estabilidad política de los países y en el clima de negocios. Los sectores más representativos de este crecimiento son la agricultura (que representa el 49% de la fuerza laboral del continente), manufacturas, servicios locales (consumo, banca, transporte, comunicaciones y turismo) y recursos naturales, que siguen siendo el motor de crecimiento del continente (principalmente minería y petróleo).

Fuente: Coface (2012), Newsletter, octubre.
Figura 1. Crecimiento robusto del PIB en los países emergentes (%)

Factores de impulso

Los factores determinantes de este nuevo interés por África son los siguientes:

  • Una creciente demanda externa de recursos naturales (petróleo y minerales) y materias primas por parte de los países emergentes, especialmente China y la India. El crecimiento en la OCDE será débil y frágil pero estos dos países seguirán siendo fuertes compradores de productos africanos.
  • Infraestructuras: África es un continente con enormes carencias en infraestructuras, que precisa desarrollo e inversión en prácticamente todos los sectores de la economía. Unos 500 millones de africanos no tiene acceso a la electricidad; Nigeria, con una población de 180 millones de habitantes, tiene la misma capacidad eléctrica que Hungría con 10 millones.[4] Es igualmente urgente invertir y mejorar las capacidades portuarias y de ferrocarril. Gran parte de la red ferroviaria data de la época colonial y la capacidad portuaria es muy limitada, obstaculizando el desarrollo regional y el comercio exterior. China ha sido consciente de ello en estos últimos 10 años, siendo hoy el primer inversor en el continente, apoyado por su Eximbank en condiciones financieras imbatibles, con tipos del orden del 2,85% para préstamos a 20 años y períodos de gracia que van de tres a siete años. En 2010 el 80% de los préstamos del Eximbank iban dirigidos a proyectos de infraestructura en África. Del total de la inversión exterior directa de China, un 3% estuvo destinada a África entre 2009 y 2010. El stock acumulado de inversión directa por parte de China en el África Subsahariana hasta 2010 fue de 11.000 millones de dólares a través de sus vehículos financieros Eximbank y China Development Bank. China es el principal proveedor de fondos en el continente y prácticamente su primer socio comercial. Nadie en África rechazará la mano tendida de China, pues hay mucho dinero en juego y los inversores en dicho continente son aún escasos, sabiendo además que tanto europeos como americanos (en menor medida) se repliegan afectados por la crisis.
  • Factor demográfico: África es uno de los mercados más poblados y con mayor predominio de jóvenes. Cientos de millones de jóvenes africanos dejarán la escuela en las próximas décadas a todos los niveles en busca de trabajo. La mitad de la población está hoy por debajo de los 24 años. En 2015 el África Subsahariana contará con 100 millones de personas con unos ingresos anuales de aproximadamente 2.300 euros, el equivalente a la clase media de la India. Se estima que en 2050 la población de África llegara a los 2.000 millones de habitantes, por delante de la India (1.600 millones) y China (1.400 millones).
  • Otro factor de crecimiento a considerar es el sector servicios:
    • Bancos: la población africana está desbancarizada. Se estima que ocho de cada 10 africanos no tienen acceso a servicios bancarios y que cuatro de cada cinco no tienen todavía abierta una cuenta bancaria. Los consumidores africanos demandan cada vez más servicios bancarios que respondan a sus necesidades, y África está abierta a la entrada de la banca extranjera. Cada vez se ven más entidades financieras apostando por el continente. Además de los tradicionales bancos franceses y británicos, o el norteamericano Citibank, se aprecia una fuerte presencia de bancos marroquíes al ser Marruecos una puerta de entrada en dicho continente, casos de Attijari Wafabank (con participación de Banco Santander) y BMCE, principalmente.
    • Comunicaciones: la penetración de Internet aún es débil, pero sigue creciendo. Debido a la pobre infraestructura telefónica, el mercado de móviles ha experimentado un crecimiento vertiginoso en un período muy corto de tiempo. La cifra de abonados fue de 360 millones en 2010, un 36% de la población aproximadamente, y su uso es más que una mera herramienta de conversación, siendo utilizado por granjeros y traders para obtener información actualizada del mercado de materias primas. Su uso como herramienta financiera de consulta y transferencias (sistema M-Pesa en Kenia) es uno de sus mayores logros dada las dificultades de acceso que tiene la población a los servicios bancarios.
  • Un factor clave adicional para el futuro del desarrollo de África es la integración regional, que a pesar de retrocesos y avances ofrece la esperanza de mercados más amplios, menos barreras y potenciales economías de escala. La principal prioridad en la próxima década es la aceleración del proceso de integración regional. Las propuestas para una única zona de libre comercio llevarán sin embargo algún tiempo. Hoy los principales bloques comerciales son SADC en el sur, EAC en el este, COMESA en el sudeste y ECOWAS/CEDEAO en el oeste (véase el Recuadro 1). Sus principales obstáculos son las barreras arancelarias, regulaciones incompatibles, débiles infraestructuras en conexiones, altos costes en el transporte de mercancías y retrasos en frontera.

La EAC es la que ha agilizado más rápidamente la integración al crear un mercado común en 2010, pero su impacto será gradual y exige una armonización legal considerable. La EAC está haciendo progresos en la creación de un mercado de casi 150 millones de personas, con un PIB cercano a los 100.000 millones de dólares y un crecimiento económico estimado por encima del 6% con respecto a la década pasada. Estos números colocarían a la EAC en la misma categoría que Bangladesh y Vietnam, ambos listados entre los próximos 11 países detrás de los BRIC con mayor potencial de convertirse en las mayores economías del siglo XXI según Goldman Sachs. También planea la introducción de una sola moneda para 2015. La UEMOA (oeste) y la CEMAC (central) zona de influencia del antiguo franco francés tienen ya su propia moneda ligada al euro.

Recuadro 1. Integración regional en África Subsahariana

SADC (Comunidad de Desarrollo de África Austral), creada en 1992 y de la que forman parte Angola, Botsuana, la R.D. del Congo, Lesoto, Madagascar, Malawi, Mauricio, Mozambique, Namibia, Seychelles, Sudáfrica, Suazilandia, Tanzania, Zambia y Zimbabue. Supone 278 millones de habitantes, con un PIB superior al 50% de toda el África Subsahariana y más del doble de la CEDEAO, pero con importantes diferencias entre países dentro de la región; por ejemplo, Mauricio, el país más próspero, es 42 veces más rico que la R.D. del Congo.EAC (East African Community), una organización compuesta por cinco países: Burundi, Kenia, Uganda, Ruanda y Tanzania. La firma del tratado para el establecimiento de la misma tuvo lugar en 1999 y fue ratificado por los Estados miembros en 2000. Es la precursora potencial de una federación africana de los países del este. Cubre 1,8 millones de km2 con una población de 132 millones de habitantes y con importantes recursos naturales.COMESA (Mercado Común de África Oriental y Austral, por sus siglas en inglés) es una unión aduanera con 20 miembros (con el recién creado Sudán del Sur), que abarca desde Libia hasta Zimbabue. COMESA fue fundada en diciembre de 1994, remplazando la zona preferencial de comercio que existió desde 1981. Nueve de los miembros formaron un tratado de libre comercio en 2000. Ruanda y Burundi se unieron a la organización en 2004 y Comoras y Libia en 2006. COMESA es uno de los pilares de la Comunidad Económica Africana. Sus miembros son Burundi, Comores, la R.D. del Congo, Yibuti, Egipto, Eritrea, Etiopia, Kenia, Libia, Madagascar, Malawi, Ruanda, Seychelles, Sudan, Sudan del Sur, Suazilandia, Uganda, Zambia y Zimbabue.ECOWAS/CEDEAO (en francés) se ha ido consolidando desde su creación en 1975 como una de las organizaciones más dinámicas de la integración africana. Cuenta con 15 Estados miembros: Benín, Burkina Faso, Cabo Verde, Costa de Marfil, Gambia, Ghana, Guinea Conakry, Guinea Bissau, Liberia, Mali, Níger, Nigeria, Senegal, Sierra Leona y Togo. Fundada el 28 de mayo de 1975 con la firma del Tratado de Lagos, su misión es promover la integración económica de la región. Considerada uno de los pilares de la Comunidad Económica Africana, la organización fue fundada con el objetivo de lograr la «autosuficiencia colectiva» de sus Estados miembros creando un único y gran bloque comercial mediante una unión económica y comercial. También sirve como fuerza de paz en la región. Opera oficialmente con tres lenguas con el mismo nivel de importancia: el inglés, el francés y el portugués. ECOWAS está formado por dos instituciones, el Secretariado y el Banco para la Inversión y el Desarrollo, anteriormente conocido como Fondo para la Cooperación hasta que fue rebautizado en 2001. James Victor Gbeho, consejero del presidente de Ghana en Asuntos Exteriores, sirve actualmente como presidente de la Comisión. Kaché Désiré Ouedraogo oficia actualmente como presidente de la Comisión. En 1976 Cabo Verde se unió a ECOWAS y en diciembre de 2000 Mauritania salió de la organización, habiendo anunciado su intención de hacerlo en diciembre de 1999.

El saldo de la balanza comercial española con África en su conjunto es tradicionalmente deficitario. En 2011, las exportaciones españolas (11.638 millones de euros para 710.598 operaciones) crecieron a una tasa del 11,51% pero siguen estando muy por debajo de las importaciones (23.313 millones de euros para 273.462 operaciones), con una tasa de crecimiento del 8,15%, siendo la cobertura del 49,92%. En 2012 la evolución sigue la misma tendencia.

Según el ICEX, la principal partida española de importación son los combustibles y lubricantes, con 16.389 millones de euros, lo que supone el 70% del total. El principal proveedor es Nigeria, con 6.062 millones de euros, ocupando el 11º puesto entre nuestros proveedores, por delante de Argelia y Marruecos. Guinea Ecuatorial aparece en el puesto 39, con 1.361 millones de euros. En lo referente a exportaciones, ningún país del África Subsahariana (con la excepción de Sudáfrica) figura entre nuestros 50 principales países de destino.[5]

Análisis de las principales economías

Angola
Desde 2002 hasta 2011 la economía ha tenido un crecimiento medio del 11%, uno de los más elevados del mundo, por encima incluso de China. Para 2012 el FMI prevé un crecimiento del PIB del 9,7%. La razón principal es la exportación de petróleo, que domina totalmente la economía angoleña y representa un 96% de los ingresos por exportaciones y un 50% del PIB. La compañía nacional Sonagol es un Estado dentro del Estado. El presupuesto nacional para 2012 está basado (con criterio muy prudente) en un precio del barril de 77 dólares. Sin embargo, las autoridades están empezando a darse cuenta del riesgo que supone la mono-dependencia del petróleo y están diversificando su economía. El sector donde las perspectivas son más positivas es el de la agricultura(6% del PIB), dado que el país dispone de 35 millones de hectáreas de tierras cultivables de las que apenas un 10% se están utilizando. El país ha invertido mucho en infraestructuras gracias a las empresas chinas. Así, el nuevo aeropuerto de Luanda, cuya entrega se espera para 2014, acogerá 13 millones de pasajeros y está construido por una empresa china.

Las oportunidades de negocio para la empresa española se encuentran en los sectores petrolífero y diamantífero, que están financiando la reconstrucción y el desarrollo del país, existiendo oportunidades en muchos sectores para la PYME y la gran empresa española. La importación de bienes de equipo, de consumo y materiales también daría enormes oportunidades de negocio para las empresas españolas. Otros sectores y subsectores con oportunidades son: energía eléctrica (generación, transporte y distribución), energía renovable, agua y saneamiento, tratamiento de residuos sólidos, hospitales y equipo sanitario, agroindustria, transporte, equipo auxiliar para la extracción de diamantes, petróleo y refino, productos químicos, materiales de construcción y maquinaria agrícola. Al ser un país emergente precisa de desarrollo en todos los ámbitos y sectores. Por ejemplo, en el sector agroalimentario sus principales proveedores son Portugal, Brasil y Sudáfrica, pero habría oportunidades para productos españoles como el aceite de oliva, las aceitunas, las conservas, los lácteos, las harinas y el arroz (la competencia sería Portugal). No hay que olvidar, sin embargo, que el alto coste de vida condiciona el establecimiento de las empresas. Luanda es una de las ciudades más caras del mundo para los expatriados. La balanza comercial española con Angola es deficitaria: en 2011 España importó por valor de 428 millones de euros, y exportó unos 256 millones.

Camerún
La economía camerunesa debiera continuar progresando en 2012 para obtener un crecimiento del 4,4% del PIB, frente al 4,1% en 2011. La estructura de la producción revela un fuerte potencial en los sectores agrícola, forestal y minero. El reparto sectorial en porcentajes del PIB sigue constante de un año a otro y está dominado por el sector servicios (46,4% en 2011 y 43,2% en 2010). El sector secundario representó el 26,4% en 2011, frente a un 27,7% en 2010: se trata básicamente de obras civiles y trabajos públicos como la red de carreteras, la agricultura y en menor medida agua y electricidad. Una ralentización de la actividad económica en la zona euro podría traducirse a medio plazo en una bajada en la demanda exterior para Camerún por parte de su principal socio comercial. El gobierno camerunés debe esforzarse en la puesta en marcha de reformas estructurales para mejorar la competitividad de la economía y el clima de los negocios. La política económica en Camerún ha venido marcada en gran medida por formar parte de la iniciativa HIPC (Heavily Indebted Poor Countries) del FMI y del Banco Mundial.

La inversión extranjera se centra en los sectores de construcción, madera, minería, materiales de construcción, bebidas alcohólicas, materiales eléctricos, refinados de petróleo y plásticos. Como la mayoría de países africanos subsaharianos, Camerún precisa de inversión y las oportunidades de negocio para la empresa española están abiertas. El sector agrícola precisa modernizarse, por lo que el equipamiento agrícola es muy demandado. Existen oportunidades para la empresa española en el sector de la industria ligera: Camerún importa componentes para su ensamblaje que destina para consumo local o exporta a los países de la región. No hay industria papelera en el país y su demanda va en aumento: papel de imprenta, materias primas para el reciclaje de productos de papel y equipos de impresión. En minería, Camerún cuenta con bauxita, cobalto, uranio, oro y mineral ferroso, siendo un sector prioritario nacional. Hay también una fuerte demanda de vehículos todo terreno debido al pésimo estado de la red de carreteras, así como de vehículos para el ejército. El descubrimiento y explotación de nuevos yacimientos de hidrocarburos, así como el desarrollo de la industria del gas, precisan de equipos de perforación y construcción de gasoductos y oleoductos.La balanza comercial de España con Camerún es deficitaria: en 2011 España importó por valor de 570 millones de euros pero sólo exportó por valor de unos 63 millones de euros.

Gabón
Gabón se está enfrentando a un declive en su producción de petróleo, que ha sido hasta hace muy poco su recurso económico más preciado desde la independencia. Gabón afronta dos retos: (1) crear una economía diversificada que no descanse únicamente en el petróleo; y (2) crear empleos para la población joven. El país aspira a ser una economía emergente en el 2035, y para lograrlo se está embarcando en una política de inversión pública en infraestructuras y fomentando la inversión doméstica e internacional a través de las SEZ (Special Economic Zones). En 2011 el PIB gabonés creció un 5,8%.

Su actividad económica ha sido intensa gracias a inversiones públicas adicionales en carreteras y estadios en la preparación de la copa de África de naciones compartida con Guinea Ecuatorial. Las previsiones económicas para 2012 y 2013 son positivas y se espera un aumento de los precios del petróleo, manganeso y madera. El 60% de los ingresos del país provienen del petróleo y este rubro supone el 75% de sus exportaciones, es el principal productor de manganeso del mundo y el segundo productor de madera en África. Su sector financiero tiene grandes carencias: el acceso a los servicios financieros y bancarios es muy limitado dado el poco desarrollo de los sistemas de pago de la banca. Los costes operativos son muy altos, lo que fuerza a los bancos a focalizarse únicamente en los sectores más rentables de su economía. Sólo un 10% de la población tiene acceso a los servicios bancarios, como ocurre en el resto de los países de su entorno. El sector financiero, al igual que en el resto de los países de la región, no se ha visto afectado por la crisis financiera y sigue siendo un sector rentable y con exceso de liquidez. La pequeña y mediana empresa raramente obtiene financiación bancaria, y el tipo nominal del interés bancario está en un 7,5%.

Hay que destacar la presencia de China y los acuerdos firmados con este país para una inversión de 4.500 millones de dólares que generará unos 50.000 empleos locales. Este acuerdo supone la creación de una SEZ en Nkok, una refinería de aceite de palma, una planta de fertilizantes, 1.000 kilómetros de carreteras pavimentadas en los próximos tres años y la construcción de 5.000 casas. Otros proyectos incluyen una mina con CICM Huazhou (empresa del grupo chino CITIC).

Las principales oportunidades de negocio para la empresa española son las siguientes:

  • Infraestructuras viarias y medioambientales: el país tiene graves deficiencias en materia de carreteras, puentes y puertos. La inmensa mayoría del terreno es selva de difícil acceso y con ríos que dificultan las comunicaciones entre zonas. Las mismas deficiencias pueden encontrarse en infraestructuras eléctricas, de potabilización y tratamiento de aguas y de residuos sólidos.
  • Gabón tiene un potencial pesquero estimado en unas 40.000tm/año y buena parte de las licencias están destinadas a barcos españoles.
  • Otro sector es la transformación de la madera. Este rubro es segundo producto de exportación tras el petróleo, siendo el sector el mayor empleador del país tras el Estado.

Los clásicos sectores interesantes para la inversión extranjera son el petrolero, la explotación forestal y transformación de madera, la extracción de manganeso, el sector agroalimentario y los de servicios y distribución comercial. La balanza comercial española con Gabón es deficitaria: en 2011 se importó por 391 millones de euros y se exportó por cerca de 44 millones de euros.

Ghana
Ghana fue el primer país del África Subsahariana en alcanzar la independencia en 1957, no ha padecido guerras civiles y es la segunda economía de África Occidental tras Nigeria. Es, además, uno de los pocos países realmente democráticos de África. El crecimiento ghanés ha sido espectacular en 2011 y se espera que siga igual de dinámico en los próximos años. Ese espectacular crecimiento le ha llevado a colocarse sólo por detrás de Nigeria entre los países de la CEDAO. Las cifras de crecimiento, sin embargo, difieren de unas fuentes a otras. El gobierno del país estima un crecimiento en 2011 del 12,3%, el FMI lo estima en un 13,7%, el BAFD en un 8,3%,y el EIU en un 8,9%. Ghana será en cualquier caso uno de los países que crecerá más rápido en esta década. La gestión macroeconómica ha mejorado en 2011, con una inflación reducida al 8,7% y un déficit público del 4,3% del PIB. Ghana dispone de margen presupuestario suficiente para poder acceder a fuentes de financiación distintas a los préstamos concesionales gracias a su estatus de país de ingreso medio y a sus ingresos petroleros. En agosto de 2011 el parlamento aprobó un préstamo de 3.000 millones de dólares del China Development Bank. Esta línea de crédito, la mayor jamás concedida y garantizada por el Estado de Ghana, servirá principalmente para financiar las necesidades en infraestructuras identificadas en el programa de crecimiento y de desarrollo del país coordinado por la agencia de crecimiento y desarrollo.

Las oportunidades de negocio para la empresa española son significativas: el sector público ofrece oportunidades fundamentalmente en suministros (médicos, maquinaria de construcción, vehículos, etc) y, sobre todo, en proyectos llave en mano en un amplio número de sectores de infraestructuras como canalización y potabilización de aguas, construcción, equipamiento de hospitales y materiales médicos, infraestructuras de transporte, electrificación y generación eléctrica, y energía (petróleo y gas). El sector privado está más interesado en la construcción residencial, materiales de construcción, el sector agroalimentario, sector automoción y sector químico, entre otros. Asimismo, en el sector privado se observa una incipiente demanda de bienes de consumo de calidad media-alta. La inversión acumulada española en Ghana es bastante reducida. Desde 1993 hasta 2010 aparecen registrados sólo 32,2 millones de euros. En los últimos cuatro años solamente ha habido inversión española en el año 2009, por valor de 2,6 millones de euros. La balanza comercial de España con Ghana tuvo superávit en 2011.

Guinea Ecuatorial
Guinea Ecuatorial es uno de los países de mayor crecimiento en los últimos 15 años, con una tasa de crecimiento medio anual del PIB del 38,4% (1995-2005) debido a la explotación petrolífera. Hoy es el cuarto mayor productor de petróleo de África Subsahariana tras Nigeria, Angola y Congo, con más barriles per cápita que Arabia Saudí (medio barril de crudo por habitante y día). Este rubro supone alrededor del 80% del PIB, casi el 100% de las exportaciones y más del 90% de los ingresos del gobierno.[7]A pesar del condicionante del petróleo, el verdadero motor de la economía proviene del ambicioso programa de inversiones públicas del gobierno.

El gobierno aprobó un plan de desarrollo a finales del 2007 llamado Horizonte 2020 con un doble propósito: acelerar la reducción de la pobreza y crear las bases para ser un país moderno con una economía diversificada, condición necesaria para generar empleo y reducir la dependencia de los hidrocarburos. Este plan tiene dos fases: hasta 2012 se centrará en mejorar las infraestructuras del país y aumentar los servicios públicos, mientras que la segunda fase consiste en sacarle el mayor rendimiento posible a las reservas del paísmediante las mejores opciones de inversión en activos internacionales.

Respecto a las oportunidades de negocio para la empresa española, Guinea Ecuatorial es el único país de habla española de los 54 que conforman África. Los ecuatoguineanos aprecian a España y muchos de ellos se educaron y se educan aquí. Pero se sienten olvidados por España. Además, existen importantes oportunidades para las empresas españolas. Ahora son los brasileños, franceses, norteamericanos, egipcios, chinos y marroquíes los que están haciendo negocios en el país. La empresa española tiene una escasa presencia. Hay oportunidades en la ampliación de puertos y aeropuertos, tanto en prestaciones (seguridad, logística y formación) como en servicios (comercios, restaurantes y catering). El turismo y los servicios financieros están muy poco desarrollados, con un número muy reducido de bancos (cuatro) y una gran escasez de concesión de créditos, sobre todo a largo plazo. Esta situación del sector financiero claramente debe mejorar, sobre todo teniendo en cuenta la importante inversión extranjera a causa de su auge económico y la importancia de las reservas en divisas del Estado. En la agricultura los principales recursos fueron la explotación de madera, el cacao y el café. Hoy la agricultura y la pesca apenas suponen el 2,5% del PIB y están en declive a pesar de las subvenciones del Estado, que hacen que los cultivos tradicionales de exportación (cacao y café) se mantengan. La agricultura biológica es una verdadera oportunidad.

Senegal
El crecimiento de Senegal viene sostenido principalmente por el consumo privado, el cual a su vez viene reforzado por las transferencias de los emigrantes senegaleses en el extranjero, así como el sector industrial y el de servicios. El paro sigue siendo una asignatura pendiente, en particular para los jóvenes que padecen una tasa de empleo un 25% inferior. El crecimiento del PIB ha decaído en 2011 ligeramente debido a los cortes continuados en el suministro eléctrico hasta finales de septiembre de 2011. La proyección de crecimiento según el African Outlook 2012 es del 4,25% en 2012 y del 4,7% para 2013. Estas previsiones vienen respaldadas por la puesta en marcha del Programa de Gobierno con el apoyo del Instrumento de Política Económica (ISPE-II) 2010-13. Los principales programas de inversión dentro del plan de restructuración abarcan el lanzamiento del sector energético (TAKKAL) y del sector de carreteras, con la consecución de las obras de la autopista de peaje. El sector primario ha contribuido con un 17,4% del PIB en 2011 y esta tendencia debiera continuar en 2012 y 2013. Las principales partidas han sido la agricultura (8,20%), la ganadería y la caza (4,22%), pero todas ellas dependen de la pluviometría. El sector secundarioha contribuido con un 21% en 2011, con idéntica proyección para 2012 y 2013. Las principales partidas han sido la construcción (4%) y la transformación de la carne y el pescado (3%). El sector terciario, incluyendo a la administración pública, ha contribuido en un 60% al PIB y debe su dinamismo en 2011 a las partidas del comercio, transporte, telecomunicación, correos y otros servicios. Esta tendencia debiera continuar también en 2012 y 2013.

Los sectores más relevantes para la inversión española son:

  • La agricultura de contre-saison. Sector que ya está funcionando y que tiene gran potencial, aprovechando la experiencia española en zonas como Almería y Murcia.
  • La plantación de jatrofa y otras oleaginosas para la producción de bio-diesel.
  • La pesca, a pesar de la sobreexplotación del caladero y de no constituir un sector para nuevas inversiones, sí mantiene la presencia de empresas españolas.
  • El turismo tiene mucho potencial aunque el estado de las infraestructuras del país sea deficitario, la situación medioambiental cuestionable y la relación precio-calidad poco favorable.
  • La construcción y los materiales de construcción: se precisan más viviendas y la producción de cemento es insuficiente.
  • La energía, pues las carencias energéticas del Senegal pueden abrir oportunidades a empresas españolas. La desalación de agua es también un potencial de futuro que las autoridades senegalesas han declarado querer explotar con España.

Nigeria
Nigeria ha tenido un crecimiento medio del 7,4% en los últimos 10 años y las previsiones para 2012 son del 6,9%. El Estado deberá llegar a su objetivo de controlar la inflación y no superar la barrera del 10% para 2013. La inflación ha pasado del 13,7% en 2010 al 10,2% en 2011 de acuerdo a una política de rigor monetario y a la bajada de precios de los productos alimenticios. El crecimiento económico no ha conseguido reducir los niveles de pobreza del país ni ha creado suficiente empleo. El paro es muy elevado y más del 60% de la población vive por debajo de los niveles de pobreza, con menos de 1 dólar al día. El estado ruinoso de las infraestructuras constituye un problema de peso para la economía del país, al igual que su dependencia excesiva del sector petrolero y del gas. Estos problemas están a la cabeza de las prioridades del Estado. Las autoridades intentan que el sector privado participe en el desarrollo de las infraestructuras y promocione y dé salida a los sectores no petroleros.

El crecimiento en 2011 vino impulsado por otros sectores diferentes del petróleo, y esta ralentización de 2011 es imputable a la degradación de la economía mundial y a la parada de la producción petrolera en el país. Aunque el petróleo domina la economía nigeriana, la agricultura ocupa también un lugar destacable aportando un 35,2% al PIB del país. Este sector debiera en los próximos años reducir la pobreza y garantizar una mejor seguridad alimentaria de la población, objetivos del gobierno en su programa de transformación agrícola. Han sido otros sectores como las telecomunicaciones, la hostelería y restauración, las industrias manufactureras (producción de cemento) y el refino de petróleo los que han tirado de la economía en 2011. También debe destacarse la inversión pública (en la infraestructura energética y transporte) y el consumo privado.

Nigeriaes la potencia económica y militar del África Occidental. Es el país más poblado de África (según Naciones Unidas, la población nigeriana tiene una tasa anual de crecimiento del 2,37%, es decir, un crecimiento anual de entre 2 millones y 2,5 millones de nigerianos) y es la segunda economía subsahariana por detrás de Sudáfrica, además del principal productor de petróleo del continente junto con Angola. Su instrumento básico de política económica es el NEEDS (National Economic Empowerment Development Strategy), el cual identifica seis grandes motores de desarrollo de la inversión tanto local como extranjera: petróleo, gas, agricultura, minerales sólidos, procesado y fabricación, y turismo. Además, también son objetivos de esta estrategia acelerar el programa de privatizaciones, aplicar reformas y mejorar la gestión de los servicios que proporciona el Estado, implementar la transparencia y el control presupuestario para eliminar la corrupción, mejorar las infraestructuras y mejorar el nivel de empleo mediante el fomento de PYMES.

Existen oportunidades de negocio para la empresa española tanto en el ámbito del comercio como de la inversión. Sin embargo, hay obstáculos de carácter estructural (infraestructuras) y coyuntural (aranceles, lista extensiva de productos no importable) que no facilitan ni lo uno ni lo otro. Entre los sectores con potencial demanda de importaciones se encuentran:

  • Bienes de equipo y maquinaria en general (maquinaria para agroindustria).
  • Vehículos de menos de ocho años con sus piezas y partes.
  • Materiales de construcción.
  • Maquinaria de obras públicas.
  • Componentes de telefonía móvil.
  • Material eléctrico.
  • Productos agroalimentarios transformados.

España tiene en vigor un APRI desde el año 2002 que establece un marco jurídico estable para las inversiones. Dentro del proceso privatizador hay oportunidades en plantas de ensamblaje de vehículos, generación eléctrica, refinado de petróleo, puertos y hoteles.

¿Qué se puede hacer desde España para vincular a la PYME con el continente africano?

Al ser el sector exportador hoy el motor de crecimiento en España, y con la convicción de que o se crece fuera o no se crece, nuestras representaciones en el exterior (Embajadas principalmente) tienen como una de sus misiones más importantes contribuir a que las empresas españolas generen negocio en destino. Se aspira pues a una mayor diplomacia económica y los Ministerios de Exteriores y Cooperación y Economía deben trabajar conjuntamente en la misma línea. La importancia de la Marca España en la política exterior española exigirá un nuevo planteamiento de las representaciones diplomáticas y consulares, atendiendo a los países de interés prioritario y aprovechando en su caso las sinergias que puedan ofrecer las delegaciones de la UE en el exterior e incorporando a las oficinas de las Comunidades Autónomas.

Sin embargo, África Subsahariana no ha sido, y no lo es todavía, una prioridad empresarial española. África está cerca y debemos aprovecharlo. El continente está creciendo y necesitamos potenciar y apoyar a nuestras empresas dado que ya es, y será en mayor medida en el futuro, uno de los pilares del crecimiento mundial. España cuenta para ello con una serie de organismos oficiales e instituciones de referencia, como las que proporciona el Ministerio de Economía y Competitividad (Secretaria de Estado de Comercio-Dirección General de Comercio e Inversiones), CESCE, CASA África, el ICEX y las oficinas comerciales, las cámaras de Comercio y Cofides.

Ministerio de Economía y Competitividad-Secretaria de Estado de Comercio (Dirección General de Comercio e Inversiones)
Tradicionalmente, África aparece muy poco en las estadísticas españolas y se habla poco de dicho continente. Con la excepción de Marruecos y Argelia, los medios, incluso los especializados, no resaltan el importante momento por el que está pasando este continente al sur del Magreb. Hay que reconocer que las relaciones económicas bilaterales son escasas. Del total de exportaciones españolas sólo un 1,5% va destinada a esta región y un 3,7% del total de las importaciones proviene del África Subsahariana, de las cuales un gran porcentaje (48%) es petróleo nigeriano. El total de exportaciones españolas en 2010 fue de 2.862 millones de euros y el de importaciones 8.917 millones.

Además, hay un muy bajo nivel de inversiones. Aproximadamente un 0,2% del total de la IED española va destinada a la región, y está muy concentrada en Sudáfrica y Namibia. A diferencia de otras regiones y países, África Subsahariana no ha sido hasta ahora una prioridad empresarial española y no forma parte de la estrategia internacional de sus empresas. La falta de seguridad jurídica para los negocios, la escasez de infraestructuras, nula o casi nula financiación, y una carencia de información sobre la región hace que la empresa española sea reticente a adentrarse en el continente. Pero atendiendo a sus tasas de crecimiento y oportunidades es necesario establecer una iniciativa empresarial apoyada por la administración española, intensificando las visitas oficiales conjuntas con las empresas, dándole prioridad a las cuestiones económico-empresariales en nuestras embajadas en la región, así como promoviendo las visitas de personalidades oficiales de esos países a España.

El apoyo financiero español a la internacionalización en África Subsahariana viene a través del crédito a la exportación con apoyo oficial bajo donaciones, créditos ligados, créditos desligados conversión de deuda y apoyo comercial. Los mecanismos utilizados serían el FIEM (FEV), el capital riesgo oficial con fondos COFIDES, Líneas País, Líneas EFP, líneas sectoriales, cobertura CESCE e ICO. Existe además un marco legal bilateral de Acuerdos de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones APPRI (actualmente los hay firmados y en vigor con Sudáfrica, Namibia, Nigeria y Guinea Ecuatorial; firmados con Mauritania, Senegal, Gambia, Ghana, Congo, Angola y Etiopia; y en negociación con Mali, Burkina, Cabo Verde y Costa de Marfil), así como convenios de doble imposición (CDI).

Dentro del apoyo español a la internacionalización se cuenta también con la red de oficinas económicas y comerciales, el ICEX y el apoyo del MAEC a través de su Dirección General para África. A continuación se analizan brevemente algunos instrumentos y/o mecanismos de apoyo del gobierno español para con África Subsahariana.

Destaca especialmente el FIEM (Fondo para la Internacionalización de la Empresa), destinado a la promoción de las exportaciones de bienes y servicios de empresas españolas, así como de la inversión directa española en el exterior y la participación de las empresas españolas en las licitaciones internacionales. Arrancó en 2011con algunas dificultades propias de un comienzo, agravadas por el efecto negativo de la crisis financiera internacional en los mercados, lo que ha supuesto una mayor demanda del mismo a la hora de desarrollar proyectos en el exterior.

La Secretaría de Estado de Comercio tiene de acuerdo a la normativa internacional e interna su propia metodología de selección de mercados prioritarios geográficamente. Estos mercados son básicamente países emergentes y economías dinámicas, entre las que no figura ningún país africano subsahariano. Los países elegibles para financiación concesional ligada son aquellos con un nivel de renta per cápita bajo o medio atendiendo a los estándares del Banco Mundial; en este supuesto los elegibles de África serían: Angola, Burkina Faso, Camerún, República Democrática del Congo, Costa de Marfil, Ghana, Guinea y Guinea Bissau. Además, existen Programas de Cooperación financiera bilateral que integran como instrumento de financiación los recursos ligados concesionales. Los hay firmados con Kenia y Cabo Verde. Los países HIPCque hayan alcanzado el punto de culminación[8] podrán recibir financiación reembolsable con cargo al FIEM con carácter excepcional y si lo aprueba el consejo de ministros. Entre estos se encuentran: Burkina Faso, Camerún, Ghana, Mali, Mozambique, Burundi, República de África Central, Republica del Congo, Guinea Bissau, Níger, Ruanda, Senegal, Sierra Leona, Tanzania, Togo, Uganda y Zambia.

Para los países menos avanzados (PMA), el apoyo del FIEM se centraría en la financiación no reembolsable para estudios de viabilidad, asistencia técnica, ingeniería y consultoría. Esto abre la posibilidad de colaborar con la AECID. Entre estos PMA estarían 33 países de África.

CESCE: política de cobertura
Con África Subsahariana no existen prácticamente techos-país y su política de cobertura se basa para la mayoría de las operaciones en estudios caso por caso, lo que dificulta el pleno desarrollo de las operaciones comerciales. Este modelo de cobertura viene dado también por una escasez de demanda de pólizas por parte de las PYME, lo que genera un círculo vicioso por ambas partes. Actualmente los techos a medio y largo plazo son para Angola y Gabón. En otros países de África Subsahariana las operaciones se tratan caso por caso, y también en algunos con póliza abierta en el corto plazo.

Casa África
Hay que destacar la importante labor que está haciendo Casa África por el continente a todos los niveles. Su actividad se desarrolla al servicio de la acción exterior del Estado en el marco del Plan África y como herramienta de la diplomacia pública. Promociona las relaciones con África con el fin de reforzar la posición internacional y económica de España, contribuyendo a construir relaciones duraderas de confianza con los países y regiones económicas más importantes del continente. Paralelamente a la creación y consolidación de su lugar en las relaciones políticas con África, Casa África ha ido progresivamente ocupando un espacio cada vez más importante en el apoyo a la internacionalización de las empresas españolas y en el refuerzo del sector exterior. Se ha trasladado al empresariado español la realidad y las oportunidades de los mercados africanos mediante encuentros, foros, publicaciones, jornadas informativas, creación de redes y, por supuesto, el continuo apoyo a las actividades de las instituciones españolas del sector.

Casa África mantiene también una estrecha relación con los principales organismos multilaterales africanos, como BAFD, UA, CDAO, NEPAD, SADC y EAC. Trata, en definitiva, de acercar África a España y dar a conocer el potencial del continente en nuestro país. También busca trabajar cerca de las instituciones y sociedades africanas para conocer sus intereses y prioridades. El valor añadido que ofrece Casa África a la internacionalización de las empresas españolas es su interlocución y el aprovechamiento de cinco intensos años de actividades de diplomacia pública, con un amplio grado de aceptación y conocimiento tanto por parte de gobiernos africanos como del cuerpo diplomático y los organismos internacionales que operan en el continente. El gobierno español considera a la Red de Casas, en la que incluye Casa África, como uno de los pilares del trabajo sobre la Marca España. En opinión del autor esta Casa debiera potenciarse y aprovecharse desde el punto de vista empresarial pues es un excelente puente de acceso hacia el continente.

ICEX y África: Red de Oficinas Comerciales en África Subsahariana
Existen aproximadamente unas 25 oficinas comerciales en África Subsahariana y algunas de ellas tutelan dos, tres o cuatro países a la vez. Es un cuerpo absolutamente fundamental en el exterior y su labor es crucial para la empresa española que aterrice en cualquiera de estos países. Los consejeros comerciales y su equipo de analistas hacen una muy buena labor de difusión, apoyo y asesoría a la empresa española. Aunque hay otras publicaciones, sus informes y guías país hay que leerlos obligatoriamente si queremos adentrarnos en esos mercados. Hay que llamar al consejero comercial o cartearse con el vía e-mail, pues normalmente responde y da soluciones orientativas a las inquietudes del empresario español. La oficina Comercial es el brazo ejecutivo del gobierno español para con las empresas. Es cierto también que el MAEC, en sintonía con el Ministerio de Economía, hace una creciente labor de apoyo empresarial y también es fundamental para los empresarios.

Cámaras de comercio
A pesar de las estrecheces presupuestarias debe procurarse que las cámaras de comercio españolas sigan con su labor de difusión y apoyo en las misiones comerciales empresariales a África. Con dicho continente las hay muy activas, como las de Canarias, pero también las de Cataluña y Madrid. Normalmente son más activas aquellas en las que su conjunto empresarial tiene más lazos con África y más comercio exterior. En 2011 no hubo más que 28 misiones directas comerciales al África Subsahariana.

COFIDES
Al ser una compañía de capital mixto de financiación al desarrollo, tiene una vocación financiadora de proyectos en los países menos desarrollados (PMD), y África Subsahariana lo es. Por ello se ha creado una Línea África Subsahariana para proyectos elegibles privados y viables con participación española y que se realicen en cualquier país de África Subsahariana a excepción de Sudáfrica. Hay una serie de sectores prioritarios incluidos, como agroindustria, energías renovables, infraestructuras y servicios públicos, transportes y turismo. COFIDES podrá dar su apoyo financiero como participación en capital, préstamos subordinados, préstamos participativos y préstamos de coinversión. Los límites de financiación son de 25 millones de euros con un máximo de hasta el 70% (FIEX) y del 80% (Fonpyme) del volumen de inversión en el proyecto. La dotación actual de la línea de financiación es de 35 millones de euros (2012) y las solicitudes deben plantearse a COFIDES. COFIDES además participa con el BEI en el esquema de financiación denominado EFP (European Financing Partners).

Banco Africano de Desarrollo (BAFD)
Destaca este organismo multilateral africano en el que España comparte silla con franceses y belgas. El peso de España en el accionariado es del 1,058%. El ámbito sectorial del banco actualmente es infraestructuras (transporte, energía, agua y tecnologías de la información y la comunicación –TIC–), gobernanza, desarrollo del sector privado, educación superior y formación profesional. Agricultura y cambio climático son también ámbitos de intervención. Los proyectos a los que la PYME española se pudiera presentar se deciden entre el país beneficiario y el BAFD. Es decir, el país receptor solicita en función de lo que pueda ofrecer el banco. Únicamente en las operaciones del sector privado una empresa presenta un proyecto al banco y éste, en su caso, decide sobre la financiación. La experiencia nos dice que normalmente se trata de grandes proyectos industriales o financieros con lo que para una PYME no será fácil acceder a esa ventanilla. Para las necesidades internas del BAFD se podría acudir a una PYME y en ese caso el banco se pondría en contacto con la misma a través de la base de datos DACON. A pesar de ser accionistas del citado organismo no se ha podido hasta ahora sacarle el partido necesario para apoyar a la empresa española.

Conclusiones

El objetivo de este trabajo es mostrar lo que África Subsahariana ofrece, apuntando que para ello hay que conocerla desde dentro, trabajársela, entenderla y no quedarse con los tópicos (que es la tendencia de muchos). Ello supone grandes dosis de entusiasmo, aventura, toma de decisiones, experiencia sobre el terreno –más en este continente que en otros– capacidad de transformarse y sentirse parte de ese mundo, mucha lectura de su historia, contactos con la administración de cada país, vocación de formación y, finalmente y muy importante, mucha diplomacia.

La empresa debe conducir a la administración española a creer en África. Las miras hacia el exterior desde el punto de vista empresarial no sólo están en los mercados maduros como la UE y en proceso acelerado de madurez como Iberoamérica, sino también en regiones que están creciendo a ritmos del 6% y 7% desde hace 10 años, como es el caso que nos ocupa. El hecho de no tener historial colonial con dicho continente (salvo el caso marroquí y ecuatoguineano) no debe paralizarnos, pues está deseoso de recibir nuevos interlocutores con una buena tecnología como la española, con buenos productos e ingeniería puntera y con políticas de formación por parte de nuestras empresas. Lo mismo puede ser trasladable al sector de la educación: cuantos más africanos estudien en España más futuro tendrá España en el continente, pues los estudiantes africanos de hoy en España serán los futuros dirigentes en su país; en esto Francia nos lleva mucha ventaja. Es importante que la administración española en general se esfuerce con África, pero también que la empresa española contribuya a ese esfuerzo.

Rafael Gómez-Jordana Moya
Director Área de África
Dirección Financiera y Relación con Inversores
Banco Santander

Referencias bibliográficas


BAFD (2012), African Economic Outlook 2012, www.africanoutlook.org.

Economist Intelligence Unit (EIU) (2012), “Africa Open for Business. The Potential, Challenges and Risks”, febrero.

Economist Intelligence Unit (EIU) (2012), “Into Africa. Emerging Opportunities for Business”, pp. 1-12.

Economist Intelligence Unit (EIU) (2012), Country Risk Service.

Fitch Ratings (2012), The China-Africa Connection, 28/XII/2012, pp. 1-12.

ICEX, Oficinas comerciales de los distintos países, Guías País Ofcomes, 2012.

Jeune Afrique (2012), “Développement: l’Afrique idéale”, Jeune Afrique, nº 2692-2693, agosto, pp. 24-39.

Stamm, Anne (2003), L’Afrique de la colonisation a l’Independence, Presse Universitaire de France-PUF, 2003.

The New York Forum AFRICA, Gabon, junio de 2012, www.ny-forum-africa.com.

Wesseling, Henry (1996), Le partage de l’Afrique 1880-1914, Gallimard.


[1] “África es tan múltiple e inmensa que exige visiones y análisis susceptibles de tener en cuenta su diversidad y su pluralidad. Aun siendo cierto que a África es posible definirla en singular, es obligado describirla y declinarla al plural y, al tiempo que su pasado está aún sin definir, su presente no llega a ser perfecto, y su futuro es ciertamente condicional”.

[2] Jeune Afrique, nº 2698, p. 105.

[3] M. Ncube (2012), Bulletin de Presse de l’BAFD, octubre.

[4] Economist Intelligence Unit (2012), “The Economist Report: Into Africa”.

[5] Datos de Aduanas.

[6] Datos del Economist Intelligence Unit, previsiones 2012; Jeune Afrique (2012), “L’État de l’Afrique”; y African Economic Outlook 2011-2012, 2012. Accesible en www.africaneconomicoutlook.org; Guías País del ICEX.

[7] Ofcomes (2012), Guía País, Malabo, junio.

[8] Momento en el que el país recibe la mayor parte de la asistencia, que se concreta en la condonación efectiva del stock de deuda y en el porcentaje adecuado para asegurar los ratios de sostenibilidad.