El presidente del Real Instituto Elcano Emilio Lamo de Espinosa, tras su asistencia a la IX Encuentro Empresarial Iberoamericano y al VI Congreso de la Lengua que tuvo lugar en la ciudad de Panamá durante los últimos días de octubre de 2013, reflexiona sobre diversos elementos de la realidad latinoamericana, su papel en el mundo global, la relevancia de la Alianza del Pacífico, las relaciones entre América Latina y España y el papel de la lengua española.
En esta primera intervención, analiza el papel de América Latina en el mundo, marcado por la fragmentación y la ausencia de una voz latinoamericana en los asuntos globales que empañan el dinamismo de la región. Sin embargo, considera que la Alianza del Pacífico es una iniciativa con futuro que permite a Latinoamérica hacer un pivote a Asia.
En segundo lugar y en relación a Iberoamérica, Emilio Lamo considera que en Panamá tuvieron lugar tres cumbres: una económica, una política y una cultural. Opina que la cumbre económica-empresarial fue muy exitosa donde las grandes multinacionales europeas, en especial españolas, compartieron protagonismo con las multilatinas. De la cumbre política de Jefes de Estado y Gobiernos, destaca las dificultades en latinoamericanizar esta iniciativa. Asimismo, recuerda la importancia de resaltar la dimensión bilateral en las relaciones entre los países latinoamericanos y España, tal y como ya se argumentó en el 3º Informe Elcano «La política española hacia América Latina: Primar lo bilateral para ganar en lo global» (de Carlos Malamud, allá por 2005).
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Respecto a la tercera cumbre, la cultural que tuvo como hilo conductor la lengua española, Lamo de Espinosa considera que la lengua es el elemento que articula la comunidad iberoamericana, aunque advierte sobre el excesivo optimismo que existe sobre la demografía de la lengua española. Destaca como fundamental la necesaria latinoamericanización de la lengua y de todas las iniciativas vinculadas a ella, y el papel de México como potencia lingüística.
Las posibilidades del continente y el papel de España en ese contraste entre el dinamismo en lo económico y la fragmentación en lo político quedan como cuestiones abiertas a futuro.