Tema
Las elecciones en Angola dieron de nuevo la victoria al partido en el poder y al presidente João Lourenço. Este resultado asegura la continuidad del proceso de reformas económicas ya iniciadas, pero está por ver si dará respuesta a importantes retos sociales y a la necesaria diversificación de la economía angoleña.
Resumen
El año 2022 ha sido clave para Angola por diversos acontecimientos. Por un lado, el inaudito resultado de las últimas elecciones celebradas en agosto plantea –por primera vez desde la independencia– un posible cambio de gobierno a medio plazo. Por otro, el fin de ciclo económico recesivo, pone nuevamente de manifiesto la urgente necesidad de diversificar la economía angoleña centrada en el petróleo, para dar cabida a actividades económicas que, aun siendo menos lucrativas, puedan impulsar la reducción del desempleo y la pobreza de la población angoleña.
Desde la perspectiva de España, las diferentes visitas de jefes de Estado y de Gobierno al país, lanzan un mensaje de creciente y renovado interés en un país que supone uno de los más importantes proveedores de petróleo africano a España.
Desde la perspectiva de Angola, el gobierno pretende continuar con un proceso ya iniciado de reformas aperturistas de la economía, centrado en la atracción de inversión extranjera y la diversificación de sus relaciones exteriores, al tiempo que debe dar respuesta al creciente descontento social y que el resultado de las últimas elecciones ha puesto de manifiesto.
Análisis
Situación política
Desde que Agostinho Neto declara la independencia de Portugal en noviembre de 1975, el partido en el gobierno de Angola ha sido siempre el Movimento Popular de Libertação de Angola (MPLA). Los comienzos políticos fueron complejos, pues el final de la guerra de independencia es también el punto de inicio de la guerra civil. El sucesor de Neto, José Eduardo Dos Santos, líder del MPLA durante 38 años, firmará los acuerdos de Estoril en 1999. Estos acuerdos pondrán punto final a una guerra civil de 27 años, que enfrentó por el poder al MPLA (apoyado por Cuba y la URSS), contra la União Nacional para a Independência Total de Angola (UNITA) (apoyada por Portugal y Sudáfrica, con Jonas Savimbi como fundador y líder) y el Frente Nacional de Libertação de Angola (FNLA). A Dos Santos, presidente del país hasta 2017, le sucede Joao Lourenço, su ministro de Defensa, actual presidente, que acaba de ganar su segunda legislatura (2022-2027). En definitiva, el panorama político en Angola ha estado dominado desde la independencia por el partido en el poder, el MPLA, siendo el principal partido opositor la UNITA. Los resultados electorales siempre han favorecido masivamente al MPLA, que obtuvo, por ejemplo, la mayoría absoluta en 1992 (53% de los votos), en 2008 (82% de los votos), en 2012 (72%) y en 2017 (61%).
Las últimas elecciones celebradas el 24 de agosto de 2022, han dado un vuelco a esta tendencia histórica. El MPLA ha sufrido un importante revés, obtiene su peor resultado histórico, mientras que la UNITA obtiene por el contrario su mejor resultado desde 1975.
El terremoto político originado por el resultado de las elecciones se explica por un cambio sustancial en los escaños logrados por partido y oposición:
- El partido en el gobierno (MPLA) disminuye su porcentaje de votos del 61% al 51% y pierde 26 escaños, lo que lo descabalga de la mayoría absoluta por primera vez en tres décadas.
- UNITA gana 33 escaños y obtiene por primera vez mayoría absoluta en feudos tradicionales del MPLA, como Luanda. Arrasa además en la región clave de Cabinda, un exclave estratégico para Angola, que se encuentra geográficamente dentro de la República Democrática del Congo, y que produce el 60% del petróleo del país.
Los resultados de los comicios, además de la baja participación (menor del 45%), son un importante reflejo del descontento de la población con el MPLA y con el presidente Lourenço, al que se reprocha no haber podido rebajar los problemas de pobreza, inflación y alto desempleo. Este resultado es un cambio más que notable también para la UNITA, liderada actualmente por Alberto Costa Jr., y tiene consecuencias inmediatas para la toma de decisiones. La pérdida de escaños por parte del MPLA fuerza la necesidad de mayor consenso para la toma de decisiones con la oposición. Para algunos, estos resultados permiten vislumbrar un cambio de gobierno en el 2027.
Figura 1. Partidos políticos en Angola y resultado electoral en 2022
(total de escaños en la Asamblea Nacional = 220)
| MPLA | Movimento Popular de Libertação de Angola | De origen marxista, pero evolucionado hacia la social-democracia | MPLA, UNITA** y FNLA*** son resultado de los tres grupos nacionalistas que lucharon primero contra Portugal y luego se enfrentaron entre ellos en la guerra civil. Fueron apoyados por diferentes potencias internacionales en el contexto de la guerra fría. | 124 escaños |
| UNITA | União Nacional para a Independência Total de Angola | Ideología de centro derecha | ** | 90 escaños |
| FNLA | Frente Nacional de Libertação de Angola | Centro derecha | *** | 2 escaños |
| PRS | Partido de Renovação Social | Centro izquierda | Fundado en 1990. Participó por primera vez en las elecciones de 1992 (consiguió seis escaños) | 2 escaños |
| PHA | Partido Humanista de Angola | Centro/centro izquierda | Partido de nueva creación (2022) de perfil humanista y liderado por Florbela Malaquias | 2 escaños |
| CASA-CE | Convergência Ampla de Salvação de Angola – Coligação Eleitoral | Coalición de partidos de centro derecha | Coalición de cinco partidos formada en 2012, por un antiguo líder de UNITA. Su mejor resultado fue en 2017, con 16 escaños | 0 escaños |
Existe una cierta pauta por la cual algunos países africanos transitan por tres fases hasta llegar a una democracia plena. La primera es un periodo de lucha por la independencia y en ocasiones de guerra civil. Después tiene lugar una segunda fase donde el grupo o partido vencedor pone en marcha un gobierno autocrático seguido, con suerte, de una tercera fase de democracia y elecciones limpias. En el caso de Angola, cuando el presidente Lourenço asume el liderazgo del partido y del país en 2017, comienza un periodo de transición tras décadas de gobierno autocrático en las que el poder había estado centralizado en el presidente Dos Santos y su entorno. Así, Lourenço asume la misión de luchar contra la corrupción, con especial presión en el entorno de la familia del expresidente Dos Santos (algo que probablemente su mentor no esperaba), incluyendo la persecución del hijo de Dos Santos, José Filomeno, y de su hija Isabel, más conocida por ser la protagonista de los “Luanda leaks”.
¿Está Angola en la tercera fase de transito hacia democracia plena? Es complejo afirmarlo desde fuera, teniendo en cuenta que el presidente procede del mismo partido político que su predecesor y que no habido alternancia de partidos en el poder. Es cierto que las elecciones de 2022 han sido unánimemente calificadas como pacíficas, pero se señalan irregularidades desde diferentes ámbitos, por lo que la transición angoleña hacia esa tercera fase de democracia plena parece difícil de confirmar. Los diferentes indicadores internacionales de corrupción (como el Índice de Percepción de la Corrupción de Transparencia Internacional) y algunos indicadores africanos de gobernabilidad (como el Ibrahim Index of African Governance -IIAG)_todavía sitúan a Angola como uno de los países africanos con mayores niveles de corrupción, aunque detectan avances en positivo en los últimos años.
Situación económica favorable, pero a expensas del precio del petróleo
Angola –quinta economía africana en términos de PIB y segundo productor de petróleo en África Subsahariana–, experimentó un impulso económico positivo en 2022 que le permitió salir de una larga y profunda recesión de seis años (2016-2021). Por ello, no es de extrañar que la economía ocupara un lugar central en las elecciones nacionales de agosto. La recuperación, apoyada en el aumento de los precios del petróleo y los altos niveles de producción, ha impulsado el crecimiento económico y el entorno macro en general, además de ayudar al país a reducir su deuda pública al 56,5% del PIB (frente al 79,7% en 2021).
El rasgo básico de la economía angoleña es la muy escasa diversificación productiva y exportadora, lo que permite entender el comportamiento de la economía fuertemente ligado a la volatilidad de los precios del petróleo. Siendo muchos los países africanos que están poco diversificados, Angola es en comparativa continental uno de los países con menos diversificación y más acoplado a la evolución del precio del crudo. Esa falta de diversificación se refleja, por ejemplo, observando cómo en los últimos 15 años el único producto nuevo que se ha añadido a la “cesta de exportaciones” es el gas natural. Una de las razones que puede explicar escasa diversificación puede tener que ver con la ausencia de incentivos, sobre todo en épocas de bonanza económica, donde los abundantes ingresos provenientes del petróleo pueden haber desincentivado la necesidad de reformas económicas. Así, la estructura productiva de Angola se concentra en términos de PIB en el sector industrial (46% del total del PIB), con peso creciente del sector servicios (45,5%) y de la agricultura (8,5%):
Figura 2. Sectores económicos y aportación al PIB de Angola, 2010 y 2021 (%)
| 2010 | 2021 | |
|---|---|---|
| Sector primario: agricultura, ganadería y pesca | 6,1 | 8,5 |
| Sector industrial: | 52,4 | 46,0 |
| Extracción de petróleo y gas natural Extracción de diamantes y otros Construcción Otros | 37,5 0,7 9,0 5,2 | 28,9 1,6 9,6 5,9 |
| Sector servicios: | 41,9 | 45,5 |
| Comercio Transportes y almacenaje Correos y telecomunicaciones Intermediación financiera y seguros Administración pública y defensa Servicios inmobiliarios Otros servicios | 11,5 2,7 1,8 2,0 10,6 4,4 8,5 | 17,4 1,8 2,6 0,7 9,9 5,9 5,6 |
Uno de los principales elementos de riesgo que se señala para muchos países africanos para el 2023 es el pago de la deuda soberana. En el caso de Angola, la deuda pública está por el momento relativamente controlada y representa actualmente menos del 60% del PIB del país. Las perspectivas son positivas, siempre y cuando se mantenga un ciclo de precios altos del petróleo que garantice ingresos fiscales para el gobierno y que acompañe al programa de contención que el gobierno tiene en marcha.
Conviene recordar que la situación más crítica se produjo en el año 2020, en el que el país estuvo rozando el impago, y con niveles de deuda en torno al 137% del PIB.
Esta situación llevó a Angola a solicitar el alivio de la deuda y la moratoria en el pago de intereses impulsada por el G20. Además, los préstamos respaldados por petróleo representaban en ese momento dos quintas partes de la deuda externa de Angola y la mayor parte de sus obligaciones con China, su mayor acreedor. Al bajar los precios del petróleo, el país se veía obligado a bombear más petróleo para pagar sus deudas, una medida insostenible, lo que estaba dando a China una puerta para ampliar sus participaciones en yacimientos petrolíferos. En el punto álgido de la pandemia, Angola pudo llegar a un acuerdo con China, para aplazar el servicio de la deuda.
Se estima que África en general tiene una deuda estimada de 153.000 millones de dólares con China, en la que Angola es el principal acreedor africano en créditos comprometidos (algunas de las cifras de la Figura 3 incluyen desembolsos ya realizados o préstamos no desembolsados pero comprometidos):
Figura 3. Top 20 de países receptores de prestamos de China en África, 2000-2020
(en millones US$)
Fuente: Chatham House (2022)
El fin de la recesión económica, pero no de la “recesión social”
El MPLA ha sido cuestionado –y probablemente esto se refleja en los últimos resultados electorales– por no atajar los altos niveles de pobreza y desempleo del país. La persistente elevada inflación y el alza en los precios de los alimentos provoca especial descontento en un país que, recordemos, es el segundo productor de petróleo de África y la quinta potencia económica del continente.
Además, el crecimiento demográfico de Angola, con una tasa de fertilidad de 6,2 hijos por mujer, representa un enorme reto para la mejora de los indicadores de pobreza y desarrollo. La población actual de 33 millones aumentará, según las previsiones, a 45 millones en 2030. Por esto, a pesar de las positivas estimaciones de crecimiento económico del país, estas pueden no ser suficientes para mejorar (aunque si mantener) los niveles de ingreso de la población. Teniendo en cuenta que el 66% de la población angoleña tiene actualmente menos de 25 años, se puede afirmar que la batalla para la prosperidad estará centrada en el mercado laboral y sobre todo en reducir el desempleo juvenil.
Relaciones económicas bilaterales
El principal producto exportado por Angola al resto del mundo es el petróleo, que supone más del 90% del total de las exportaciones. En las últimas décadas, el único producto nuevo que se ha incorporado a la cesta de exportaciones angoleñas ha sido el gas natural que, junto con la tradicional exportación de diamantes, completan el total de las ventas al resto del mundo. Siguiendo esta pauta de concentración de las exportaciones, el principal producto exportado a España es igualmente el petróleo crudo y, así, la balanza comercial de España con Angola es históricamente deficitaria.
Para España, el continente africano es un importante proveedor de petróleo. Nigeria, principal productor africano, es también el principal proveedor a España, y supone algo más del 14% del total de las compras de petróleo españolas al exterior para el año 2002, según los datos del Ministerio de Industrial, Comercio y Turismo. Angola es el 4º suministrador de petróleo africano a España, por detrás de Nigeria, Libia y Argelia y en el año 2022, aportó en torno al 3% de las necesidades españolas de crudo:
Figura 4. Principales proveedores africanos de petróleo a España, 2022
| Importaciones de petróleo crudo (millones €) | % sobre el total de importaciones mundiales | |
|---|---|---|
| 1. Nigeria | 6.028,8 | 14,3 |
| 2. Libia | 3.351,9 | 8,0 |
| 3. Argelia | 2.401,5 | 5,7 |
| 4. Angola | 1.322,4 | 3,1 |
| 5. Guinea Ecuatorial | 735,3 | 1,7 |
| 6. Camerún | 279,5 | 0,7 |
| 7. Túnez | 116,2 | 0,3 |
| 8. Ghana | 107,9 | 0,3 |
| 9. Gabón | 103,9 | 0,2 |
| 10. Egipto | 69,6 | 0,2 |
| 11. Senegal | 24,7 | 0,1 |
| Total mundial | 42.027,9 | 100,0 |
El principal socio comercial en términos de ventas al exterior de Angola es actualmente China, que recibe aproximadamente el 60% de las exportaciones angoleñas. Aunque España recibe aproximadamente el 2% del total de exportaciones, en términos europeos las compras de España son más importantes que las de Portugal o Francia. Luego es posible afirmar que España representa para Angola el principal socio comercial europeo, en lo que a exportaciones se refiere.
Desde el punto de vista de las compras de Angola en el exterior, China se ha convertido igualmente en el principal socio comercial y suministra algo menos de la cuarta parte de los productos importados por el país (fundamentalmente maquinas, aparatos mecánicos y combustibles). En el contexto europeo, España no tiene sin embargo excesiva relevancia (apenas suministra un 1,5% del total de productos importados por Angola), siendo Portugal el principal socio comercial europeo.
En relación con la inversión extranjera en Angola, esta se concentra mayoritariamente en proyectos ligados al sector petrolífero.
China ha realizado grandes inversiones en el país a cambio de petróleo, pero todavía los principales inversores son EEUU y Francia, por este orden. España, por su parte, tiene una presencia reducida con apenas una veintena de empresas actualmente instaladas en el país, según el registro del ICEX para el 2022. En años anteriores, sin embargo, la cifra de empresas españolas era casi del doble. En los años de mayor corrupción del gobierno de Dos Santos, algunas empresas españolas que estaban haciendo negocios en Angola aparecieron en los “Luanda leaks” y han sido y están siendo investigadas por posibles delitos.
Según la Oficina Económica y Comercial de España en Luanda, casi todas las empresas españolas que operaron en Angola en 2021 sufrieron retrasos e impagos. Además, se han señalado dificultades para el acceso al mercado por la preferencia de empresas locales en compras públicas, trámites aduaneros complejos y dificultad de acceso a divisas. El entorno empresarial es por tanto complejo; en el último indicador de facilidad de hacer negocios (Doing Business) publicado por el Banco Mundial en 2020, se situaba a Angola en la posición 177 del total de 190 países indexados. Aún y todo, Angola se sigue señalando como un país de oportunidades en diversos sectores: agroindustria, turismo, sector textil, producción y distribución eléctrica e infraestructuras de comunicación, entre otros. El proceso de privatizaciones a gran escala del gobierno (PROPRIV), supone también una oportunidad de entrada para el sector privado.
Conclusiones y dilema
1. El comportamiento de la economía de Angola y la sostenibilidad prevista de su deuda dependen en gran medida de un mercado de petróleo que, aunque si bien es actualmente favorable, es del todo impredecible.
2. Un contexto de precios internacionales del crudo elevados, como el ciclo actual, genera una ingente cantidad de ingresos para el gobierno y garantiza el servicio de la deuda. Sin embargo, el sector extractivo ofrece una cantidad limitada de empleo y no contribuye necesariamente a la reducción de la pobreza.
3. El dilema económico de Angola está en seguir apostando por el sector del petróleo, que proporciona recursos y que afianza su posición como potencia energética y económica del continente, o virar la economía a sectores menos estratégicos, como la agricultura y el sector servicios, que pueden absorber mayor cantidad de empleo.
4. El gobierno reelegido del MPLA de Angola tendrá que centrarse de cualquier forma en la creación de trabajo, una mayor inclusión económica y la diversificación de la economía. La batalla para la prosperidad estará centrada en el mercado de trabajo, con importantes presiones demográficas y un paro juvenil desorbitado, que ronda el 60%.
5. Para España, Angola está llamada a ser un socio económico de importancia creciente. Aunque actualmente tiene una importancia media como suministrador de petróleo, no deja de ser uno de los mayores productores africanos. Además, las perspectivas de producción de crudo angoleño a medio plazo apuntan a un crecimiento importante, apoyado sobre todo por el incremento de las extracciones en el exclave de Cabinda.
Imagen: Pedro Sánchez recibe a João Lourenço en La Moncloa. Madrid 28.9.2021. Foto: Pool Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa. La Moncloa.
